El comandante Farragut era un buen marino, digno de la fragata que le había sido confiada. Su navío y él formaban una unidad, de la que él era el alma.
No permitía que la existencia del cetáceo fuera discutida a bordo, por no abrigar la menor duda sobre la misma. Creía en él como algunas buenas mujeres creen en el Leviatán, por fe, no por la razón. Estaba tan seguro de su existencia como de que libraría los mares de él. Lo había jurado. Era una especie de caballero de Rodas, un Diosdado de Gozon en busca de la serpiente que asolaba su isla. O el comandante Farragut mataba al narval o el narval mataba al comandante Farragut. Ninguna solución intermedia.
COMMANDER FARRAGUT was a good seaman, worthy of the frigate he commanded. His ship and he were one. He was its very soul. On the cetacean question no doubts arose in his mind, and he didn't allow the animal's existence to be disputed aboard his vessel. He believed in it as certain pious women believe in the leviathan from the Book of Job--out of faith, not reason. The monster existed, and he had vowed to rid the seas of it. The man was a sort of Knight of Rhodes, a latter-day Sir Dieudonné of Gozo, on his way to fight an encounter with the dragon devastating the island. Either Commander Farragut would slay the narwhale, or the narwhale would slay Commander Farragut. No middle of the road for these two.
Los oficiales de a bordo compartían la opinión de su jefe. Había que oírles hablar, discutir, disputar, calcular las posibilidades de un encuentro y verles observar la vasta extensión del océano. Más de uno se imponía una guardia voluntaria, que en otras circunstancias hubiera maldecido, en los baos del juanete. Y mientras el sol describía su arco diurno, la arboladura estaba llena de marineros, como si el puente les quemara los pies, que manifestaban la mayor impaciencia. Y eso que el Abraham Lincoln estaba todavía muy lejos de abordar las aguas sospechosas del Pacífico.
The ship's officers shared the views of their leader. They could be heard chatting, discussing, arguing, calculating the different chances of an encounter, and observing the vast expanse of the ocean. Voluntary watches from the crosstrees of the topgallant sail were self-imposed by more than one who would have cursed such toil under any other circumstances. As often as the sun swept over its daily arc, the masts were populated with sailors whose feet itched and couldn't hold still on the planking of the deck below! And the Abraham Lincoln's stempost hadn't even cut the suspected waters of the Pacific.
La tripulación estaba, en efecto, impaciente por encontrar al unicornio, por arponearlo, izarlo a bordo y despedazarlo. Por eso vigilaba el mar con una escrupulosa atención. El comandante Farragut había hablado de una cierta suma de dos mil dólares que se embolsaría quien, fuese grumete o marinero, contramaestre u oficial, avistara el primero al animal. No hay que decir cómo se ejercitaban los ojos a bordo del Abraham Lincoln.
As for the crew, they only wanted to encounter the unicorn, harpoon it, haul it on board, and carve it up. They surveyed the sea with scrupulous care. Besides, Commander Farragut had mentioned that a certain sum of $2,000.00 was waiting for the man who first sighted the animal, be he cabin boy or sailor, mate or officer. I'll let the reader decide whether eyes got proper exercise aboard the Abraham Lincoln.
Por mi parte, no le cedía a nadie en atención en las observaciones cotidianas. La fragata hubiera podido llamarse muy justificadamente Argos. Conseil era el único entre todos que se manifestaba indiferente a la cuestión que nos apasionaba y su actitud contrastaba con el entusiasmo general que reinaba a bordo.
As for me, I didn't lag behind the others and I yielded to no one my share in these daily observations. Our frigate would have had fivescore good reasons for renaming itself the Argus, after that mythological beast with 100 eyes! The lone rebel among us was Conseil, who seemed utterly uninterested in the question exciting us and was out of step with the general enthusiasm on board.
Ya he dicho cómo el comandante Farragut había equipado cuidadosamente su navío, dotándolo de los medios adecuados para la pesca del gigantesco cetáceo. No hubiera ido mejor armado un ballenero. Llevábamos todos los ingenios conocidos, desde el arpón de mano hasta los proyectiles de los trabucos y las balas explosivas de los arcabuces. En el castillo se había instalado un cañón perfeccionado que se cargaba por la recámara, muy espeso de paredes y muy estrecho de ánima, cuyo modelo debe figurar en la Exposición Universal de 1867. Este magnífico instrumento, de origen americano, enviaba sin dificultad un proyectil cónico de cuatro kilos a una distancia media de dieciséis kilómetros.
As I said, Commander Farragut had carefully equipped his ship with all the gear needed to fish for a gigantic cetacean. No whaling vessel could have been better armed. We had every known mechanism, from the hand-hurled harpoon, to the blunderbuss firing barbed arrows, to the duck gun with exploding bullets. On the forecastle was mounted the latest model breech-loading cannon, very heavy of barrel and narrow of bore, a weapon that would figure in the Universal Exhibition of 1867. Made in America, this valuable instrument could fire a four-kilogram conical projectile an average distance of sixteen kilometers without the least bother.
El Abraham Lincoln no carecía, pues, de ningún medio de destrucción. Pero tenía algo mejor aún. Tenía a Ned Land, el rey de los arponeros.
So the Abraham Lincoln wasn't lacking in means of destruction. But it had better still. It had Ned Land, the King of Harpooners.
Ned Land era un canadiense de una habilidad manual poco común, que no tenía igual en su peligroso oficio. Poseía en grado superlativo las cualidades de la destreza y de la sangre fría, de la audacia y de la astucia. Muy maligna tenía que ser una ballena, singularmente astuto debía ser un cachalote, para que pudiera escapar a su golpe de arpón.
Gifted with uncommon manual ability, Ned Land was a Canadian who had no equal in his dangerous trade. Dexterity, coolness, bravery, and cunning were virtues he possessed to a high degree, and it took a truly crafty baleen whale or an exceptionally astute sperm whale to elude the thrusts of his harpoon.
Ned Land tenía unos cuarenta años de edad. Era un hombre de elevada estatura -más de seis pies ingleses y de robusta complexión. Tenía un aspecto grave y era poco comunicativo, violento a veces y muy colérico cuando se le contrariaba. Su persona llamaba la atención, y sobre todo el poder de su mirada que daba un singular acento a su fisonomía.
Ned Land was about forty years old. A man of great height--over six English feet--he was powerfully built, serious in manner, not very sociable, sometimes headstrong, and quite ill-tempered when crossed. His looks caught the attention, and above all the strength of his gaze, which gave a unique emphasis to his facial appearance.
Creo que el comandante Farragut había estado bien inspirado al contratar a este hombre que, por su ojo y su brazo, valía por toda la tripulación. No puedo hallarle mejor comparación que la de un potente telescopio que fuese a la vez un cañón.
Commander Farragut, to my thinking, had made a wise move in hiring on this man. With his eye and his throwing arm, he was worth the whole crew all by himself. I can do no better than to compare him with a powerful telescope that could double as a cannon always ready to fire.
Quien dice canadiense dice francés y, por poco comunicativo que fuese Ned Land, debo decir que me cobró cierto afecto, atraído quizá por mi nacionalidad. Era para él una ocasión de hablar, como lo era para mí de oír, esa vieja lengua de Rabelais todavía en uso en algunas provincias canadienses. La familia del arponero era originaria de Quebec, y formaba ya una tribu de audaces pescadores en la época en que esa tierra pertenecía a Francia.
To say Canadian is to say French, and as unsociable as Ned Land was, I must admit he took a definite liking to me. No doubt it was my nationality that attracted him. It was an opportunity for him to speak, and for me to hear, that old Rabelaisian dialect still used in some Canadian provinces. The harpooner's family originated in Quebec, and they were already a line of bold fishermen back in the days when this town still belonged to France.
Poco a poco, Ned se aficionó a hablar conmigo. A mí me gustaba mucho oírle el relato de sus aventuras en los mares polares. Narraba sus lances de pesca y sus combates, con una gran poesía natural. Sus relatos tomaban una forma épica que me llevaba a creer estar oyendo a un Homero canadiense cantando la Ilíada de las regiones hiperbóreas.
Little by little Ned developed a taste for chatting, and I loved hearing the tales of his adventures in the polar seas. He described his fishing trips and his battles with great natural lyricism. His tales took on the form of an epic poem, and I felt I was hearing some Canadian Homer reciting his Iliad of the High Arctic regions.
Describo ahora a este audaz compañero tal como lo conozco actualmente. Somos ahora viejos amigos, unidos por la inalterable amistad que nace y se cimenta en las pruebas difíciles. ¡Ah, mi buen Ned! Sólo pido vivir aún cien años más para poder recordarte más tiempo.
I'm writing of this bold companion as I currently know him. Because we've become old friends, united in that permanent comradeship born and cemented during only the most frightful crises! Ah, my gallant Ned! I ask only to live 100 years more, the longer to remember you!
¿Cual era la opinión de Ned Land sobre la cuestión del monstruo marino? Debo confesar que no creía apenas en el unicornio y que era el único a bordo que no compartía la convicción general. Incluso evitaba hablar del tema, sobre el que le abordé un día.
And now, what were Ned Land's views on this question of a marine monster? I must admit that he flatly didn't believe in the unicorn, and alone on board, he didn't share the general conviction. He avoided even dealing with the subject, for which one day I felt compelled to take him to task.
Era el 30 de julio, es decir, a las tres semanas de nuestra partida, y la fragata se hallaba a la altura del cabo Blanco, a treinta millas a sotavento de las costas de la Patagonia. Habíamos pasado ya el trópico de Capricornio, y el estrecho de Magallanes se abría a menos de setecientas millas al sur. Antes de ocho días, el Abraham Lincoln se hallaría en aguas del Pacífico.
During the magnificent evening of June 25--in other words, three weeks after our departure--the frigate lay abreast of Cabo Blanco, thirty miles to leeward of the coast of Patagonia. We had crossed the Tropic of Capricorn, and the Strait of Magellan opened less than 700 miles to the south. Before eight days were out, the Abraham Lincoln would plow the waves of the Pacific.
Hacía una magnífica tarde, y sentados en la toldilla hablábamos Ned Land y yo de unas y otras cosas, mientras mirábamos el mar misterioso cuyas profundidades han permanecido hasta aquí inaccesibles a los ojos del hombre. Llevé naturalmente la conversación al unicornio gigantesco, y me extendí en consideraciones sobre las diversas posibilidades de éxito o de fracaso de nuestra expedición. Luego, al ver que Ned Land me dejaba hablar, le ataqué más directamente.
Seated on the afterdeck, Ned Land and I chatted about one thing and another, staring at that mysterious sea whose depths to this day are beyond the reach of human eyes. Quite naturally, I led our conversation around to the giant unicorn, and I weighed our expedition's various chances for success or failure. Then, seeing that Ned just let me talk without saying much himself, I pressed him more closely.
-¿Cómo es posible, Ned, que no esté usted convencido de la existencia del cetáceo que perseguimos? -¿Tiene usted razones particulares para mostrarse tan incrédulo?
"Ned," I asked him, "how can you still doubt the reality of this cetacean we're after? Do you have any particular reasons for being so skeptical?"
El arponero me miró durante algunos instantes antes de responder, se golpeó la frente con la mano, con un gesto que le era habitual, cerró los ojos como para recogerse y dijo, al fin:
The harpooner stared at me awhile before replying, slapped his broad forehead in one of his standard gestures, closed his eyes as if to collect himself, and finally said:
-Quizá, señor Aronnax.
"Just maybe, Professor Aronnax."
-Sin embargo, Ned, usted que es un ballenero profesional, usted que está familiarizado con los grandes mamíferos marinos, usted cuya imaginación debería aceptar fácilmente la hipótesis de cetáceos enormes, parece el menos indicado… debería ser usted el último en dudar, en semejantes circunstancias.
"But Ned, you're a professional whaler, a man familiar with all the great marine mammals--your mind should easily accept this hypothesis of an enormous cetacean, and you ought to be the last one to doubt it under these circumstances!"
-Se equivoca, señor profesor. Pase aún que el vulgo crea en cometas extraordinarios que atraviesan el espacio o en la existencia de monstruos antediluvianos que habitan el interior del globo, pero ni el astrónomo ni el geólogo admitirán tales quimeras. Lo mismo ocurre con el ballenero. He perseguido a muchos cetáceos, he arponeado un buen número de ellos, he matado a muchos, pero por potentes y bien armados que estuviesen, ni sus colas ni sus defensas hubieran podido abrir las planchas metálicas de un vapor.
"That's just where you're mistaken, professor," Ned replied. "The common man may still believe in fabulous comets crossing outer space, or in prehistoric monsters living at the earth's core, but astronomers and geologists don't swallow such fairy tales. It's the same with whalers. I've chased plenty of cetaceans, I've harpooned a good number, I've killed several. But no matter how powerful and well armed they were, neither their tails or their tusks could puncture the sheet-iron plates of a steamer."
-Y, sin embargo, Ned, se ha demostrado que el narval ha conseguido atravesar con su diente barcos de parte a parte.
"Even so, Ned, people mention vessels that narwhale tusks have run clean through."
-Barcos de madera, quizá, es posible, aunque yo no lo he visto nunca. Así que hasta no tener prueba de lo contrario, yo niego que las ballenas, los cachalotes o los unicornios puedan producir tal efecto.
"Wooden ships maybe," the Canadian replied. "But I've never seen the like. So till I have proof to the contrary, I'll deny that baleen whales, sperm whales, or unicorns can do any such thing."
-Escuche, Ned…
"Listen to me, Ned--"
-No, señor profesor, no. Todo lo que usted quiera, excepto eso. ¿Quizá un pulpo gigantesco?
"No, no, professor. I'll go along with anything you want except that. Some gigantic devilfish maybe . . . ?"
-Aún menos, Ned. El pulpo no es más que un molusco, y ya esto indica la escasa consistencia de sus carnes. Aunque tuviese quinientos pies de longitud, el pulpo, que no pertenece a la rama de los vertebrados, es completamente inofensivo para barcos tales como el Scotia o el Abraham Lincoln. Hay que relegar al mundo de la fábula las proezas de los krakens u otros monstruos de esa especie.
"Even less likely, Ned. The devilfish is merely a mollusk, and even this name hints at its semiliquid flesh, because it's Latin meaning soft one. The devilfish doesn't belong to the vertebrate branch, and even if it were 500 feet long, it would still be utterly harmless to ships like the Scotia or the Abraham Lincoln. Consequently, the feats of krakens or other monsters of that ilk must be relegated to the realm of fiction."
-Entonces, señor naturalista preguntó Ned Land con un tono irónico-, ¿persiste usted en admitir la existencia de un enorme cetáceo?
"So, Mr. Naturalist," Ned Land continued in a bantering tone, "you'll just keep on believing in the existence of some enormous cetacean . . . ?"
-Sí, Ned, se lo repito con una convicción que se apoya en la lógica de los hechos. Creo en la existencia de un mamífero, poderosamente organizado, perteneciente a la rama de los vertebrados, como las ballenas, los cachalotes o los delfines, y provisto de una defensa córnea con una extraordinaria fuerza de penetración.
"Yes, Ned, I repeat it with a conviction backed by factual logic. I believe in the existence of a mammal with a powerful constitution, belonging to the vertebrate branch like baleen whales, sperm whales, or dolphins, and armed with a tusk made of horn that has tremendous penetrating power."
-¡Hum! -dijo el arponero, moviendo la cabeza con el ademán de un hombre que no quiere dejarse convencer.
"Humph!" the harpooner put in, shaking his head with the attitude of a man who doesn't want to be convinced.
-Y observe, mi buen canadiense, que si tal animal existe, si habita las profundidades del océano, si frecuenta las capas líquidas situadas a algunas millas por debajo de la superficie de las aguas, tiene que poseer necesariamente un organismo cuya solidez desafíe a toda comparación.
"Note well, my fine Canadian," I went on, "if such an animal exists, if it lives deep in the ocean, if it frequents the liquid strata located miles beneath the surface of the water, it needs to have a constitution so solid, it defies all comparison."
-Y ¿por qué un organismo tan poderoso? -preguntó Ned.
"And why this powerful constitution?" Ned asked.
-Porque hace falta una fuerza incalculable para mantenerse en las capas profundas y resistir a su presión.
"Because it takes incalculable strength just to live in those deep strata and withstand their pressure."
-¿De veras? -dijo Ned, que me miraba con los ojos entrecerrados.
"Oh really?" Ned said, tipping me a wink.
-Ciertamente, y algunas cifras se lo probarán fácilmente.
"Oh really, and I can prove it to you with a few simple figures."
-¡Oh, las cifras! -replicó Ned-. Se hace lo que se quiere con las cifras.
"Bosh!" Ned replied. "You can make figures do anything you want!"
-En los negocios, sí, Ned, pero no en matemáticas. Escuche. Admitamos que la presión de una atmósfera esté representada por la presión de una columna de agua de treinta y dos pies de altura. En realidad, la altura de la columna sería menor, puesto que se trata de agua de mar cuya densidad es superior a la del agua dulce. Pues bien, cuando usted se sumerge, Ned, tantas veces cuantas descienda treinta y dos pies soportará su cuerpo una presión igual a la de la atmósfera, es decir, de kilogramos por cada centímetro cuadrado de su superficie. De ello se sigue que a trescientos veinte pies esa presión será de diez atmósferas, de cien atmósferas a tres mil doscientos pies, y de mil atmósferas, a treinta y dos mil pies, es decir a unas dos leguas y media. Lo que equivale a decir que si pudiera usted alcanzar esa profundidad en el océano, cada centímetro cuadrado de la superficie de su cuerpo sufriría una presión de mil kilogramos. ¿Y sabe usted, mi buen Ned, cuántos centímetros cuadrados tiene usted en superficie?
"In business, Ned, but not in mathematics. Listen to me. Let's accept that the pressure of one atmosphere is represented by the pressure of a column of water thirty-two feet high. In reality, such a column of water wouldn't be quite so high because here we're dealing with salt water, which is denser than fresh water. Well then, when you dive under the waves, Ned, for every thirty-two feet of water above you, your body is tolerating the pressure of one more atmosphere, in other words, one more kilogram per each square centimeter on your body's surface. So it follows that at 320 feet down, this pressure is equal to ten atmospheres, to 100 atmospheres at 3,200 feet, and to 1,000 atmospheres at 32,000 feet, that is, at about two and a half vertical leagues down. Which is tantamount to saying that if you could reach such a depth in the ocean, each square centimeter on your body's surface would be experiencing 1,000 kilograms of pressure. Now, my gallant Ned, do you know how many square centimeters you have on your bodily surface?"
-Lo ignoro por completo, señor Aronnax.
"I haven't the foggiest notion, Professor Aronnax."
-Unos diecisiete mil, aproximadamente.
"About 17,000."
¿Tantos? ¿De veras?
"As many as that?"
-Y, como, en realidad, la presión atmosférica es un poco superior al peso de un kilogramo por centímetro cuadrado, sus diecisiete mil centímetros cuadrados están soportando ahora una presión de diecisiete mil quinientos sesenta y ocho kilogramos.
"Yes, and since the atmosphere's pressure actually weighs slightly more than one kilogram per square centimeter, your 17,000 square centimeters are tolerating 17,568 kilograms at this very moment."
-¿Sin que yo me dé cuenta?
"Without my noticing it?"
-Sin que se dé cuenta. Si tal presión no le aplasta a usted es porque el aire penetra en el interior de su cuerpo con una presión igual. De ahí un equilibrio perfecto entre las presiones interior y exterior, que se neutralizan, lo que le permite soportarla sin esfuerzo. Pero en el agua es otra cosa.
"Without your noticing it. And if you aren't crushed by so much pressure, it's because the air penetrates the interior of your body with equal pressure. When the inside and outside pressures are in perfect balance, they neutralize each other and allow you to tolerate them without discomfort. But in the water it's another story."
-Sí, lo comprendo -respondió Ned, que se mostraba más atento-. Porque el agua me rodea y no me penetra.
"Yes, I see," Ned replied, growing more interested. "Because the water surrounds me but doesn't penetrate me."
-Exactamente, Ned. Así, pues, a treinta y dos pies por debajo de la superficie del mar sufriría usted una presión de diecisiete mil quinientos sesenta y ocho kilogramos; a trescientos veinte pies, diez veces esa presión, o sea, ciento setenta y cinco mil seiscientos ochenta kilogramos; a tres mil doscientos pies, cien veces esa presión, es decir, un millón setecientos cincuenta y seis mil ochocientos kilogramos; y a treinta y dos mil pies, mil veces esa presión, o sea diecisiete millones quinientos sesenta y ocho mil kilogramos. En una palabra, que se quedaría usted planchado como si le sacaran de una apisonadora.
"Precisely, Ned. So at thirty-two feet beneath the surface of the sea, you'll undergo a pressure of 17,568 kilograms; at 320 feet, or ten times greater pressure, it's 175,680 kilograms; at 3,200 feet, or 100 times greater pressure, it's 1,756,800 kilograms; finally, at 32,000 feet, or 1,000 times greater pressure, it's 17,568,000 kilograms; in other words, you'd be squashed as flat as if you'd just been yanked from between the plates of a hydraulic press!"
-¡Diantre! -exclamó Ned.
"Fire and brimstone!" Ned put in.
-Pues bien, mi buen Ned, si hay vertebrados de varios centenares de metros de longitud y de un volumen proporcional que se mantienen a semejantes profundidades, con una superficie de millones de centímetros cuadrados, calcule la presión que resisten en miles de millones de kilogramos. Calcule usted cuál debe ser la resistencia de su armazón ósea y la potencia de su organismo para resistir a tales presiones.
"All right then, my fine harpooner, if vertebrates several hundred meters long and proportionate in bulk live at such depths, their surface areas make up millions of square centimeters, and the pressure they undergo must be assessed in billions of kilograms. Calculate, then, how much resistance of bone structure and strength of constitution they'd need in order to withstand such pressures!"
-Deben estar fabricados -respondió Ned Land- con planchas de hierro de ocho pulgadas, como las fragatas acorazadas.
"They'd need to be manufactured," Ned Land replied, "from sheet-iron plates eight inches thick, like ironclad frigates."
-Como usted dice, Ned. Piense ahora en los desastres que puede producir una masa semejante lanzada con la velocidad de un expreso contra el casco de un buque.
"Right, Ned, and then picture the damage such a mass could inflict if it were launched with the speed of an express train against a ship's hull."
-Sí… en efecto… tal vez -respondió el canadiense, turbado por esas cifras, pero sin querer rendirse.
"Yes . . . indeed . . . maybe," the Canadian replied, staggered by these figures but still not willing to give in.
-Pues bien, ¿le he convencido?
"Well, have I convinced you?"
-Me ha convencido de una cosa, señor naturalista, y es de que si tales animales existen en el fondo de los mares deben necesariamente ser tan fuertes como dice usted.
"You've convinced me of one thing, Mr. Naturalist. That deep in the sea, such animals would need to be just as strong as you say-- if they exist."
-Pero si no existen, testarudo arponero, ¿cómo se explica usted el accidente que le ocurrió al Scotia?
"But if they don't exist, my stubborn harpooner, how do you explain the accident that happened to the Scotia?"
-Pues… porque… -dijo Ned, titubeando.
"It's maybe . . . ," Ned said, hesitating.
-¡Continúe!
"Go on!"
-Pues, ¡porque… eso no es verdad! -respondió el canadiense, repitiendo, sin saberlo, una célebre respuesta de Arago.
"Because . . . it just couldn't be true!" the Canadian replied, unconsciously echoing a famous catchphrase of the scientist Arago.
Pero esta respuesta probaba la obstinación del arponero y sólo eso. Aquel día no le acosé más. El accidente del Scotia no era negable. El agujero existía, y había habido que colmarlo. No creo yo que la existencia de un agujero pueda hallar demostración más categórica. Ahora bien, ese agujero no se había hecho solo, y puesto que no había sido producido por rocas submarinas o artefactos submarinos, necesariamente tenía que haberlo hecho el instrumento perforante de un animal.
But this reply proved nothing, other than how bullheaded the harpooner could be. That day I pressed him no further. The Scotia's accident was undeniable. Its hole was real enough that it had to be plugged up, and I don't think a hole's existence can be more emphatically proven. Now then, this hole didn't make itself, and since it hadn't resulted from underwater rocks or underwater machines, it must have been caused by the perforating tool of some animal.
Y en mi opinión, y por todas las razones precedentemente expuestas, ese animal pertenecía a la rama de los vertebrados, a la clase de los mamíferos, al grupo de los pisciformes, y, finalmente, al orden de los cetáceos. En cuanto a la familia en que se inscribiera, ballena, cachalote o delfín, en cuanto al género del que formara parte, en cuanto a la especie a que hubiera que adscribirle, era una cuestión a elucidar posteriormente. Para resolverla había que disecar a ese monstruo desconocido; para disecarlo, necesario era apoderarse de él; para apoderarse de él, había que arponearlo (lo que competía a Ned Land); para arponearlo, había que verlo (lo que correspondía a la tripulación), y para verlo había que encontrarlo (lo que incumbía al azar).
Now, for all the reasons put forward to this point, I believed that this animal was a member of the branch Vertebrata, class Mammalia, group Pisciforma, and finally, order Cetacea. As for the family in which it would be placed (baleen whale, sperm whale, or dolphin), the genus to which it belonged, and the species in which it would find its proper home, these questions had to be left for later. To answer them called for dissecting this unknown monster; to dissect it called for catching it; to catch it called for harpooning it-- which was Ned Land's business; to harpoon it called for sighting it-- which was the crew's business; and to sight it called for encountering it-- which was a chancy business.