Veinte mil leguas de viaje submarino

Twenty Thousand Leagues Under the Sea

   Capítulo 11

   CHAPTER 11

   El «Nautilus»

   The Nautilus

   El capitán Nemo se levantó y yo le seguí. Por una doble puerta situada al fondo de la pieza entré en una sala de dimensiones semejantes a las del comedor.

   CAPTAIN NEMO stood up. I followed him. Contrived at the rear of the dining room, a double door opened, and I entered a room whose dimensions equaled the one I had just left.

   Era la biblioteca. Altos muebles de palisandro negro, con incrustaciones de cobre, soportaban en sus anchos estantes un gran número de libros encuadernados con uniformidad. Las estanterías se adaptaban al contorno de la sala, y terminaban en su parte inferior en unos amplios divanes tapizados con cuero marrón y extraordinariamente cómodos. Unos ligeros pupitres móviles, que podían acercarse o separarse a voluntad, servían de soporte a los libros en curso de lectura o de consulta. En el centro había una gran mesa cubierta de publicaciones, entre las que aparecían algunos periódicos ya viejos. La luz eléctrica que emanaba de cuatro globos deslustrados, semiencajados en las volutas del techo, inundaba tan armonioso conjunto. Yo contemplaba con una real admiración aquella sala tan ingeniosamente amueblada y apenas podía dar crédito a mis ojos.

   It was a library. Tall, black-rosewood bookcases, inlaid with copperwork, held on their wide shelves a large number of uniformly bound books. These furnishings followed the contours of the room, their lower parts leading to huge couches upholstered in maroon leather and curved for maximum comfort. Light, movable reading stands, which could be pushed away or pulled near as desired, allowed books to be positioned on them for easy study. In the center stood a huge table covered with pamphlets, among which some newspapers, long out of date, were visible. Electric light flooded this whole harmonious totality, falling from four frosted half globes set in the scrollwork of the ceiling. I stared in genuine wonderment at this room so ingeniously laid out, and I couldn't believe my eyes.

   -Capitán Nemo -dije a mi huésped, que acababa de sentarse en un diván-, he aquí una biblioteca que honraría a más de un palacio de los continentes. Y es una maravilla que esta biblioteca pueda seguirle hasta lo más profundo de los mares.

   "Captain Nemo," I told my host, who had just stretched out on a couch, "this is a library that would do credit to more than one continental palace, and I truly marvel to think it can go with you into the deepest seas."

   -¿Dónde podría hallarse mayor soledad, mayor silencio, señor profesor? ¿Puede usted hallar tanta calma en su gabinete de trabajo del museo?

   "Where could one find greater silence or solitude, professor?" Captain Nemo replied. "Did your study at the museum afford you such a perfect retreat?"

   -No, señor, y debo confesar que al lado del suyo es muy pobre. Hay aquí por lo menos seis o siete mil volúmenes, ¿no?

   "No, sir, and I might add that it's quite a humble one next to yours. You own 6,000 or 7,000 volumes here . . ."

   -Doce mil, señor Aronnax. Son los únicos lazos que me ligan a la tierra. Pero el mundo se acabó para mí el día en que mi Nautilus se sumergió por vez primera bajo las aguas. Aquel día compré mis últimos libros y mis últimos periódicos, y desde entonces quiero creer que la humanidad ha cesado de pensar y de escribir. Señor profesor, esos libros están a su disposición y puede utilizarlos con toda libertad.

   "12,000, Professor Aronnax. They're my sole remaining ties with dry land. But I was done with the shore the day my Nautilus submerged for the first time under the waters. That day I purchased my last volumes, my last pamphlets, my last newspapers, and ever since I've chosen to believe that humanity no longer thinks or writes. In any event, professor, these books are at your disposal, and you may use them freely."

   Di las gracias al capitán Nemo, y me acerqué a los estantes de la biblioteca. Abundaban en ella los libros de ciencia, de moral y de literatura, escritos en numerosos idiomas, pero no vi ni una sola obra de economía política, disciplina que al parecer estaba allí severamente proscrita. Detalle curioso era el hecho de que todos aquellos libros, cualquiera que fuese la lengua en que estaban escritos, se hallaran clasificados indistintamente. Tal mezcla probaba que el capitán del Nautilus debía leer corrientemente los volúmenes que su mano tomaba al azar.

   I thanked Captain Nemo and approached the shelves of this library. Written in every language, books on science, ethics, and literature were there in abundance, but I didn't see a single work on economics-- they seemed to be strictly banned on board. One odd detail: all these books were shelved indiscriminately without regard to the language in which they were written, and this jumble proved that the Nautilus's captain could read fluently whatever volumes he chanced to pick up.

   Entre tantos libros, vi las obras maestras de los más grandes escritores antiguos y modernos, es decir, todo lo que la humanidad ha producido de más bello en la historia, la poesía, la novela y la ciencia, desde Homero hasta Victor Hugo desde Jenofonte hasta Michelet, desde Rabelais hasta la señora Sand. Pero los principales fondos de la biblioteca estaban integrados por obras científicas; los libros de mecánica, de balística, de hidrografía, de meteorología, de geografía, de geología, etc., ocupaban en ella un lugar no menos amplio que las obras de Historia Natural, y comprendí que constituían el principal estudio del capitán. Vi allí todas las obras de Humboldt, de Arago, los trabajos de Foucault, de Henri Sainte Claire Deville, de Chasles, de Milne Edwards, de Quatrefages, de Tyndall, de Faraday, de Berthelot, del abate Secchi, de Petermann, del comandante Maury, de Agassiz, etc.; las memorias de la Academia de Ciencias, los boletines de diferentes sociedades de Geografía, etcétera. Y también, y en buen lugar, los dos volúmenes que me habían valido probablemente esa acogida, relativamente caritativa, del capitán Nemo. Entre las obras que allí vi de Joseph Bertrand, la titulada Los fundadores de la Astronomía me dio incluso una fecha de referencia; como yo sabía que dicha obra databa de 1865, pude inferir que la instalación del Nautilus no se remontaba a una época anterior. Así, pues, la existencia submarina del capitán Nemo no pasaba de tres años como máximo. Tal vez -me dije -hallara obras más recientes que me permitieran fijar con exactitud la época, pero tenía mucho tiempo ante mí para proceder a tal investigación, y no quise retrasar más nuestro paseo por las maravillas del Nautilus.

   Among these books I noted masterpieces by the greats of ancient and modern times, in other words, all of humanity's finest achievements in history, poetry, fiction, and science, from Homer to Victor Hugo, from Xenophon to Michelet, from Rabelais to Madame George Sand. But science, in particular, represented the major investment of this library: books on mechanics, ballistics, hydrography, meteorology, geography, geology, etc., held a place there no less important than works on natural history, and I realized that they made up the captain's chief reading. There I saw the complete works of Humboldt, the complete Arago, as well as works by Foucault, Henri Sainte-Claire Deville, Chasles, Milne-Edwards, Quatrefages, John Tyndall, Faraday, Berthelot, Father Secchi, Petermann, Commander Maury, Louis Agassiz, etc., plus the transactions of France's Academy of Sciences, bulletins from the various geographical societies, etc., and in a prime location, those two volumes on the great ocean depths that had perhaps earned me this comparatively charitable welcome from Captain Nemo. Among the works of Joseph Bertrand, his book entitled The Founders of Astronomy even gave me a definite date; and since I knew it had appeared in the course of 1865, I concluded that the fitting out of the Nautilus hadn't taken place before then. Accordingly, three years ago at the most, Captain Nemo had begun his underwater existence. Moreover, I hoped some books even more recent would permit me to pinpoint the date precisely; but I had plenty of time to look for them, and I didn't want to put off any longer our stroll through the wonders of the Nautilus.

   -Señor -dije al capitán-, le agradezco mucho que haya puesto esta biblioteca a mi disposición. Hay aquí tesoros de ciencia de los que me aprovecharé.

   "Sir," I told the captain, "thank you for placing this library at my disposal. There are scientific treasures here, and I'll take advantage of them."

   -Esta sala no es sólo una biblioteca -dijo el capitán Nemo-, es también un fumadero.

   "This room isn't only a library," Captain Nemo said, "it's also a smoking room."

   -¿Un fumadero? ¿Se fuma, pues, a bordo?

   "A smoking room?" I exclaimed. "Then one may smoke on board?"

   -En efecto.

   "Surely."

   -Entonces eso me fuerza a creer que ha conservado usted relaciones con La Habana.

   "In that case, sir, I'm forced to believe that you've kept up relations with Havana."

   -De ningún modo -respondió el capitán-. Acepte este cigarro, señor Aronnax, que aunque no proceda de La Habana habrá de gustarle, si es usted buen conocedor.

   "None whatever," the captain replied. "Try this cigar, Professor Aronnax, and even though it doesn't come from Havana, it will satisfy you if you're a connoisseur."

   Tomé el cigarro que me ofrecía. Parecía fabricado con hojas de oro, y por su forma recordaba al «londres». Lo encendí en un pequeño brasero sustentado en una elegante peana de bronce, y aspiré las primeras bocanadas con la voluptuosidad de quien no ha fumado durante dos días.

   I took the cigar offered me, whose shape recalled those from Cuba; but it seemed to be made of gold leaf. I lit it at a small brazier supported by an elegant bronze stand, and I inhaled my first whiffs with the relish of a smoker who hasn't had a puff in days.

   -Es excelente -dije-, pero no es tabaco.

   "It's excellent," I said, "but it's not from the tobacco plant."

   -No -respondió el capitán-, este tabaco no procede ni de La Habana ni de Oriente. Es una especie de alga, rica en nicotina, que me provee el mar, si bien con alguna escasez. ¿Le hace echar de menos los «londres», señor?

   "Right," the captain replied, "this tobacco comes from neither Havana nor the Orient. It's a kind of nicotine-rich seaweed that the ocean supplies me, albeit sparingly. Do you still miss your Cubans, sir?"

   -Capitán, a partir de hoy los desprecio.

   "Captain, I scorn them from this day forward."

   -Fume, pues, sin preocuparse del origen de estos cigarros. No han pasado por el control de ningún monopolio, pero no por ello son menos buenos, creo yo.

   "Then smoke these cigars whenever you like, without debating their origin. They bear no government seal of approval, but I imagine they're none the worse for it."

   -Al contrario.

   "On the contrary."

   En este momento el capitán Nemo abrió una puerta situada frente a la que me había abierto paso a la biblioteca, y por ella entré a un salón inmenso y espléndidamente iluminado.

   Just then Captain Nemo opened a door facing the one by which I had entered the library, and I passed into an immense, splendidly lit lounge.

   Era un amplio cuadrilátero (diez metros de longitud, seis de anchura y cinco de altura) en el que las intersecciones de las paredes estaban recubiertas por paneles. Un techo luminoso, decorado con ligeros arabescos, distribuía una luz clara y suave sobre las maravillas acumuladas en aquel museo. Pues de un museo se trataba realmente. Una mano inteligente y pródiga había reunido en él tesoros de la naturaleza y del arte, con ese artístico desorden que distingue al estudio de un pintor.

   It was a huge quadrilateral with canted corners, ten meters long, six wide, five high. A luminous ceiling, decorated with delicate arabesques, distributed a soft, clear daylight over all the wonders gathered in this museum. For a museum it truly was, in which clever hands had spared no expense to amass every natural and artistic treasure, displaying them with the helter-skelter picturesqueness that distinguishes a painter's studio.

   Una treintena de cuadros de grandes maestros, en marcos uniformes, separados por resplandecientes panoplias, ornaban las paredes cubiertas por tapices con dibujos severos. Pude ver allí telas valiosísimas, que en su mayor parte había admirado en las colecciones particulares de Europa y en las exposiciones. Las diferentes escuelas de los maestros antiguos estaban representadas por una madona de Rafael, una virgen de Leonardo da Vinci, una ninfa del Correggio, una mujer de Tiziano, una adoración de Veronese, una asunción de Murillo, un retrato de Holbein, un fraile de Velázquez, un mártir de Ribera, una fiesta de Rubens, dos paisajes flamencos de Teniers, tres pequeños cuadros de género de Gerard Dow, de Metsu y de Paul Potter, dos telas de Gericault y de Prudhon, algunas marinas de Backhuysen y de Vernet. Entre las obras de la pintura moderna, había cuadros firmados por Delácroix, Ingres, Decamps, Troyon, Meissonier, Daubigny, etc., y algunas admirables reducciones de estatuas de mármol o de bronce, según los más bellos modelos de la Antigüedad, se erguían sobre sus pedestales en los ángulos del magnífico museo.

El estado de estupefacción que me había augurado el comandante del Nautilus comenzaba ya a apoderarse de mi ánimo.

   Some thirty pictures by the masters, uniformly framed and separated by gleaming panoplies of arms, adorned walls on which were stretched tapestries of austere design. There I saw canvases of the highest value, the likes of which I had marveled at in private European collections and art exhibitions. The various schools of the old masters were represented by a Raphael Madonna, a Virgin by Leonardo da Vinci, a nymph by Correggio, a woman by Titian, an adoration of the Magi by Veronese, an assumption of the Virgin by Murillo, a Holbein portrait, a monk by Velazquez, a martyr by Ribera, a village fair by Rubens, two Flemish landscapes by Teniers, three little genre paintings by Gerard Dow, Metsu, and Paul Potter, two canvases by Gericault and Prud'hon, plus seascapes by Backhuysen and Vernet. Among the works of modern art were pictures signed by Delacroix, Ingres, Decamps, Troyon, Meissonier, Daubigny, etc., and some wonderful miniature statues in marble or bronze, modeled after antiquity's finest originals, stood on their pedestals in the corners of this magnificent museum. As the Nautilus's commander had predicted, my mind was already starting to fall into that promised state of stunned amazement.

   -Señor profesor -dijo aquel hombre extraño-, excusará usted el descuido con que le recibo y el desorden que reina en este salón.

   "Professor," this strange man then said, "you must excuse the informality with which I receive you, and the disorder reigning in this lounge."

   -Señor -respondí-, sin que trate de saber quién es usted, ¿puedo reconocer en usted un artista?

   "Sir," I replied, "without prying into who you are, might I venture to identify you as an artist?"

   -Un aficionado, nada más, señor. En otro tiempo gustaba yo de coleccionar estas bellas obras creadas por la mano del hombre. Era yo un ávido coleccionista, un infatigable buscador, y así pude reunir algunos objetos inapreciables. Estos son mis últimos recuerdos de esta tierra que ha muerto para mí. A mis ojos, sus artistas modernos ya son antiguos, ya tienen dos o tres mil años de existencia, y los confundo en mi mente. Los maestros no tienen edad.

   "A collector, sir, nothing more. Formerly I loved acquiring these beautiful works created by the hand of man. I sought them greedily, ferreted them out tirelessly, and I've been able to gather some objects of great value. They're my last mementos of those shores that are now dead for me. In my eyes, your modern artists are already as old as the ancients. They've existed for 2,000 or 3,000 years, and I mix them up in my mind. The masters are ageless."

   -¿Y estos músicos? -pregunté, mostrando unas partituras de Weber, de Rossini, de Mozart, de Beethoven, de Haydn, de Meyerbeer, de Herold, de Wagner, de Auber y de Gounod, y otras muchas, esparcidas sobre un piano órgano de grandes dimensiones, que ocupaba uno de los paneles del salón.

   "What about these composers?" I said, pointing to sheet music by Weber, Rossini, Mozart, Beethoven, Haydn, Meyerbeer, Hérold, Wagner, Auber, Gounod, Victor Massé, and a number of others scattered over a full size piano-organ, which occupied one of the wall panels in this lounge.

   -Estos músicos -respondió el capitán Nemo -son contemporáneos de Orfeo, pues las diferencias cronológicas se borran en la memoria de los muertos, y yo estoy muerto, señor profesor, tan muerto como aquéllos de sus amigos que descansan a seis pies bajo tierra.

   "These composers," Captain Nemo answered me, "are the contemporaries of Orpheus, because in the annals of the dead, all chronological differences fade; and I'm dead, professor, quite as dead as those friends of yours sleeping six feet under!"

   El capitán Nemo calló, como perdido en una profunda ensoñación. Le miré con una viva emoción, analizando en silencio los rasgos de su fisonomía. Apoyado en sus codos sobre una preciosa mesa de cerámica, él no me veía, parecía haber olvidado mi presencia.

   Captain Nemo fell silent and seemed lost in reverie. I regarded him with intense excitement, silently analyzing his strange facial expression. Leaning his elbow on the corner of a valuable mosaic table, he no longer saw me, he had forgotten my very presence.

   Respeté su recogimiento y continué examinando las curiosidades que enriquecían el salón.

   I didn't disturb his meditations but continued to pass in review the curiosities that enriched this lounge.

   Además de las obras de arte, las curiosidades naturales ocupaban un lugar muy importante. Consistían principalmente en plantas, conchas y otras producciones del océano, que debían ser los hallazgos personales del capitán Nemo. En medio del salón, un surtidor iluminado eléctricamente caía sobre un pilón formado por una sola tridacna. Esta concha, perteneciente al mayor de los moluscos acéfalos, con unos bordes delicadamente festoneados, medía una circunferencia de unos seis metros; excedía, pues, en dimensiones alas bellas tridacnas regaladas a Francisco I por la República de Venecia y de las que la iglesia de San Sulpicio, en París, ha hecho dos gigantescas pilas de agua bendita.

   After the works of art, natural rarities predominated. They consisted chiefly of plants, shells, and other exhibits from the ocean that must have been Captain Nemo's own personal finds. In the middle of the lounge, a jet of water, electrically lit, fell back into a basin made from a single giant clam. The delicately festooned rim of this shell, supplied by the biggest mollusk in the class Acephala, measured about six meters in circumference; so it was even bigger than those fine giant clams given to King François I by the Republic of Venice, and which the Church of Saint-Sulpice in Paris has made into two gigantic holy-water fonts.

   En torno al pilón, en elegantes vitrinas fijadas por armaduras de cobre, se hallaban, convenientemente clasificados y etiquetados, los más preciosos productos del mar que hubiera podido nunca contemplar un naturalista. Se comprenderá mi alegría de profesor.

   Around this basin, inside elegant glass cases fastened with copper bands, there were classified and labeled the most valuable marine exhibits ever put before the eyes of a naturalist. My professorial glee may easily be imagined.

   La división de los zoófitos ofrecía muy curiosos especímenes de sus dos grupos de pólipos y de equinodermos. En el primer grupo, había tubíporas; gorgonias dispuestas en abanico; esponjas suaves de Siria; ¡sinos de las Molucas; pennátulas; una virgularia admirable de los mares de Noruega; ombelularias variadas; los alcionarios; toda una serie de esas madréporas que mi maestro Milne Edwards ha clasificado tan sagazmente en secciones y entre las que distinguí las adorables fiabelinas; las oculinas de la isla Borbón; el «carro de Neptuno» de las Antillas; soberbias variedades de corales; en fin, todas las especies de esos curiosos pólipos cuya asamblea forma islas enteras que un día serán continentes Entre los equinodermos, notables por su espinosa envoltu ra, las asterias, estrellas de mar, pantacrinas, comátulas, asterófonos, erizos, holoturias, etc., representaban la colección completa de los individuos de este grupo.

   The zoophyte branch offered some very unusual specimens from its two groups, the polyps and the echinoderms. In the first group: organ-pipe coral, gorgonian coral arranged into fan shapes, soft sponges from Syria, isis coral from the Molucca Islands, sea-pen coral, wonderful coral of the genus Virgularia from the waters of Norway, various coral of the genus Umbellularia, alcyonarian coral, then a whole series of those madrepores that my mentor Professor Milne-Edwards has so shrewdly classified into divisions and among which I noted the wonderful genus Flabellina as well as the genus Oculina from Réunion Island, plus a "Neptune's chariot" from the Caribbean Sea--every superb variety of coral, and in short, every species of these unusual polyparies that congregate to form entire islands that will one day turn into continents. Among the echinoderms, notable for being covered with spines: starfish, feather stars, sea lilies, free-swimming crinoids, brittle stars, sea urchins, sea cucumbers, etc., represented a complete collection of the individuals in this group.

   Un conquiliólogo un poco nervioso se hubiera pasmado y vuelto loco de alegría ante otras vitrinas, más numerosas, en las que se hallaban clasificadas las muestras de la división de los moluscos. Vi una colección de un valor inestimable, para cuya descripción completa me falta tiempo. Por ello, y a título de memoria solamente, citaré el elegante martillo real del océano índico, cuyas regulares manchas blancas destacaban vivamente sobre el fondo rojo y marrón; un espóndilo imperial de vivos colores, todo erizado de espinas, raro espécimen en los museos europeos y cuyo valor estimé en unos veinte mil francos; un martillo común de los mares de la Nueva Holanda, de difícil obtención pese a su nombre; berberechos exóticos del Senegal, frágiles conchas blancas bivalvas que un soplo destruiría como una pompa de jabón; algunas variedades de las regaderas de Java, especie de tubos calcáreos festoneados de repliegues foliáceos, muy buscados por los aficionados; toda una serie de trocos, unos de color amarillento verdoso, pescados en los mares de América, y otros, de un marrón rojizo, habitantes de los mares de Nueva Holanda, o procedentes del golfo de México y notables por su concha imbricada; esteléridos hallados en los mares australes, y, por último, el más raro de todos, el magnífico espolón de Nueva Zelanda; admirables tellinas sulfuradas, preciosas especies de citereas y de venus; el botón trencillado de las costas de Tranquebar; el turbo marmóreo de nácar resplandeciente; los papagayos verdes de los mares de China; el cono casi desconocido del género Coenodulli; todas las variedades de porcelanas que sirven de moneda en la India y en África; la «Gloria del mar», la más preciosa concha de las Indias orientales; en fin, litorinas, delfinulas, turritelas, jantinas, óvulas, volutas, olivas, mitras, cascos, púrpuras, bucínidos, arpas, rocas, tritones, ceritios, husos, estrombos, pteróceras, patelas, hiálicos, cleodoras, conchas tan finas como delicadas que la ciencia ha bautizado con sus nombres más encantadores.

   An excitable conchologist would surely have fainted dead away before other, more numerous glass cases in which were classified specimens from the mollusk branch. There I saw a collection of incalculable value that I haven't time to describe completely. Among these exhibits I'll mention, just for the record: an elegant royal hammer shell from the Indian Ocean, whose evenly spaced white spots stood out sharply against a base of red and brown; an imperial spiny oyster, brightly colored, bristling with thorns, a specimen rare to European museums, whose value I estimated at 20,000 francs; a common hammer shell from the seas near Queensland, very hard to come by; exotic cockles from Senegal, fragile white bivalve shells that a single breath could pop like a soap bubble; several varieties of watering-pot shell from Java, a sort of limestone tube fringed with leafy folds and much fought over by collectors; a whole series of top-shell snails--greenish yellow ones fished up from American seas, others colored reddish brown that patronize the waters off Queensland, the former coming from the Gulf of Mexico and notable for their overlapping shells, the latter some sun-carrier shells found in the southernmost seas, finally and rarest of all, the magnificent spurred-star shell from New Zealand; then some wonderful peppery-furrow shells; several valuable species of cythera clams and venus clams; the trellis wentletrap snail from Tranquebar on India's eastern shore; a marbled turban snail gleaming with mother-of-pearl; green parrot shells from the seas of China; the virtually unknown cone snail from the genus Coenodullus; every variety of cowry used as money in India and Africa; a "glory-of-the-seas," the most valuable shell in the East Indies; finally, common periwinkles, delphinula snails, turret snails, violet snails, European cowries, volute snails, olive shells, miter shells, helmet shells, murex snails, whelks, harp shells, spiky periwinkles, triton snails, horn shells, spindle shells, conch shells, spider conchs, limpets, glass snails, sea butterflies-- every kind of delicate, fragile seashell that science has baptized with its most delightful names.

   Aparta en -vitrinas especiales había sartas de perlas de la mayor belleza a las que la luz eléctrica arrancaba destellos de fuego; perlas rosas extraídas de las ostras peñas del mar Rojo; perlas verdes del hialótide iris; perlas amarillas, azules, negras; curiosos productos de los diferentes moluscos de todos los océanos y de algunas ostras del Norte, y, en fin, varios especímenes de un precio incalculable, destilados por las más raras pintadinas. Algunas de aquellas perlas sobrepasaban el tamaño de un huevo de paloma, y valían tanto o más que la que vendió por tres millones el viajero Tabernier al sha de Persia o que la del imán de Mascate, que yo creía sin rival en el mundo.

   Aside and in special compartments, strings of supremely beautiful pearls were spread out, the electric light flecking them with little fiery sparks: pink pearls pulled from saltwater fan shells in the Red Sea; green pearls from the rainbow abalone; yellow, blue, and black pearls, the unusual handiwork of various mollusks from every ocean and of certain mussels from rivers up north; in short, several specimens of incalculable worth that had been oozed by the rarest of shellfish. Some of these pearls were bigger than a pigeon egg; they more than equaled the one that the explorer Tavernier sold the Shah of Persia for 3,000,000 francs, and they surpassed that other pearl owned by the Imam of Muscat, which I had believed to be unrivaled in the entire world.

   Imposible hubiera sido cifrar el valor de esas colecciones. El capitán Nemo había debido gastar millones para adquirir tales especímenes. Estaba preguntándome yo cuál sería el alcance de una fortuna que permitía satisfacer tales caprichos de coleccionista, cuando el capitán interrumpió el curso de mi pensamiento.

   Consequently, to calculate the value of this collection was, I should say, impossible. Captain Nemo must have spent millions in acquiring these different specimens, and I was wondering what financial resources he tapped to satisfy his collector's fancies, when these words interrupted me:

   -Lo veo muy interesado por mis conchas, señor profesor, y lo comprendo, puesto que es usted naturalista. Pero para mí tienen además un encanto especial, puesto que las he cogido todas con mis propias manos, sin que un solo mar del globo haya escapado a mi búsqueda.

   "You're examining my shells, professor? They're indeed able to fascinate a naturalist; but for me they have an added charm, since I've collected every one of them with my own two hands, and not a sea on the globe has escaped my investigations."

   -Comprendo, capitán, comprendo la alegría de pasearse en medio de tales riquezas. Es usted de los que han hecho por sí mismos sus tesoros. No hay en toda Europa un museo que posea una semejante colección de productos del océano. Pero si agoto aquí mi capacidad de admiración ante estas colecciones, ¿qué me quedará para el barco que las transporta? No quiero conocer secretos que le pertenecen, pero, sin embargo, confieso que este Nautilus, la fuerza motriz que encierra, los aparatos que permiten su maniobrabilidad, el poderoso agente que lo anima, todo eso excita mi curiosidad… Veo en los muros de este salón instrumentos suspendidos cuyo uso me es desconocido. ¿Puedo saber… ?…

   "I understand, captain, I understand your delight at strolling in the midst of this wealth. You're a man who gathers his treasure in person. No museum in Europe owns such a collection of exhibits from the ocean. But if I exhaust all my wonderment on them, I'll have nothing left for the ship that carries them! I have absolutely no wish to probe those secrets of yours! But I confess that my curiosity is aroused to the limit by this Nautilus, the motor power it contains, the equipment enabling it to operate, the ultra powerful force that brings it to life. I see some instruments hanging on the walls of this lounge whose purposes are unknown to me. May I learn--"

   -Señor Aronnax, ya le dije que sería usted libre a bordo, y consecuentemente, ninguna parte del Nautilus le está prohibida. Puede usted visitarlo detenidamente, y es para mí un placer ser su cicerone.

   "Professor Aronnax," Captain Nemo answered me, "I've said you'd be free aboard my vessel, so no part of the Nautilus is off-limits to you. You may inspect it in detail, and I'll be delighted to act as your guide."

   -No sé cómo agradecérselo, señor, pero no quiero abusar de su amabilidad. Únicamente le preguntaré acerca de la finalidad de estos instrumentos de física.

   "I don't know how to thank you, sir, but I won't abuse your good nature. I would only ask you about the uses intended for these instruments of physical measure--"

   -Señor profesor, esos instrumentos están también en mi camarote, y es allí donde tendré el placer de explicarle su empleo. Pero antes voy a mostrarle el camarote que se le ha reservado. Debe usted saber cómo va a estar instalado a bordo del Nautilus.

   "Professor, these same instruments are found in my stateroom, where I'll have the pleasure of explaining their functions to you. But beforehand, come inspect the cabin set aside for you. You need to learn how you'll be lodged aboard the Nautilus."

   Seguí al capitán Nemo, quien, por una de las puertas practicadas en los paneles del salón, me hizo volver al corredor del barco. Me condujo hacia adelante y me mostró no un camarote sino una verdadera habitación, elegantemente amueblada, con lecho y tocador.

   I followed Captain Nemo, who, via one of the doors cut into the lounge's canted corners, led me back down the ship's gangways. He took me to the bow, and there I found not just a cabin but an elegant stateroom with a bed, a washstand, and various other furnishings.

   Di las gracias a mi huésped.

   I could only thank my host.

   -Su camarote es contiguo al mío -me dijo, al tiempo que abría una puerta-. Y el mío da al salón del que acabamos de salir.

   "Your stateroom adjoins mine," he told me, opening a door, "and mine leads into that lounge we've just left."

   Entré en el camarote del capitán, que tenía un aspecto severo, casi cenobial. Una cama de hierro, una mesa de trabajo y una cómoda de tocador componían todo el mobiliario, reducido a lo estrictamente necesario.

   I entered the captain's stateroom. It had an austere, almost monastic appearance. An iron bedstead, a worktable, some washstand fixtures. Subdued lighting. No luxuries. Just the bare necessities.

   El capitán Nemo me mostró una silla.

   Captain Nemo showed me to a bench.

   -Siéntese, por favor.

   "Kindly be seated," he told me.

   Me senté y él tomó la palabra en los términos que siguen.

   I sat, and he began speaking as follows: